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Desde hace años, cada noviembre sala a colación la palabra Movember, que viene a ser un movimiento internacional que promueve la visibilización y la prevención de enfermedades masculinas.

Esta campaña es del todo necesaria porque la salud del hombre sigue siendo un terreno lleno de silencios y diagnósticos tardíos. En este contexto, expertos del Servicio de Urología del Hospital Ruber Internacional indican para Directivos y Empresas que la prevención sigue siendo la mejor herramienta para salvar vidas.

Los doctores Antonio Allona y Juan Ignacio Martínez-Salamanca, jefe del Servicio de Urología y jefe asociado, respectivamente, coinciden en que la concienciación sigue siendo insuficiente. “En salud masculina, la prevención es nuestra mejor herramienta. Detectar a tiempo un cáncer de próstata puede marcar la diferencia entre un tratamiento curativo y una enfermedad avanzada difícil de controlar”, subraya el Dr. Allona. Y lo cierto es que los datos le dan la razón.

doctores Antonio Allona y Juan Ignacio Martínez-Salamanca

Doctores Antonio Allona y Juan Ignacio Martínez-Salamanca.

El cáncer más común en hombres… y uno de los más desconocidos por ellos

El cáncer de próstata es el tumor más frecuente entre los hombres en España y en gran parte del mundo. Pese a que su evolución suele ser lenta, uno de cada ocho varones lo desarrollará a lo largo de su vida. Sin embargo, muchos siguen sin acudir a revisiones periódicas, incluso cuando superan la edad recomendada para iniciar controles.

El equipo de Ruber Internacional insiste en que la prevención es simple y accesible: una analítica para medir los niveles de PSA (antígeno prostático específico), junto con una exploración urológica anual, permite detectar de forma precoz cualquier alteración. Lo ideal, explican, es comenzar estas revisiones a partir de los 50 años, o antes —a partir de los 45— si existen antecedentes familiares.

Pero el problema no es solo la falta de información, sino la resistencia cultural. A menudo los hombres evitan acudir al urólogo hasta que tienen síntomas. Pero el cáncer de próstata no avisa. Movember nos recuerda que revisarse a tiempo es un acto de responsabilidad, no de miedo, afirma el Dr. Martínez-Salamanca. La idea de que las revisiones urológicas solo son necesarias cuando aparece dolor o molestias es, según los expertos, uno de los errores más peligrosos.

Cáncer testicular: menos frecuente, más joven y altamente curable

En el otro extremo de la pirámide de edad se sitúa el cáncer testicular, una enfermedad que, aunque poco frecuente, afecta de forma preferente a varones jóvenes entre los 15 y 35 años. A diferencia del cáncer de próstata, aquí la detección precoz no depende de pruebas médicas complejas: basta con una autoexploración mensual, una práctica que la mayoría de los jóvenes desconoce o no realiza.

Los especialistas destacan que este tipo de cáncer tiene una tasa de curación muy elevada, especialmente cuando se detecta en etapas iniciales. De ahí la importancia de la autoexploración: un gesto sencillo, rápido y sin coste que puede marcar la diferencia. “La educación sobre salud masculina debería llegar mucho antes. Si los jóvenes aprendieran desde la adolescencia a autoexplorarse, muchos casos se diagnosticarían con más antelación”, explican desde el equipo de Urología.

Más allá del cáncer: la salud íntima masculina que aún se vive en silencio

Movember no habla solo de cáncer, y los doctores Allona y Martínez-Salamanca tampoco. Al contrario, recuerdan que otras patologías urológicas —frecuentes, tratables, pero llenas de estigma— afectan directamente a la calidad de vida del hombre y continúan siendo evitadas en las consultas. Entre ellas destacan tres:

  1. Disfunción eréctil: Este tabú sigue siendo tan grande que muchos tardan años en pedir ayuda. Sin embargo, muchos casos se deben a causas físicas y cuentan con tratamientos eficaces.
  2. Hiperplasia benigna de próstata (HBP): Un problema benigno pero muy frecuente que implica síntomas urinarios molestos: dificultad para orinar, aumento de la frecuencia nocturna o disminución del flujo. Su abordaje temprano evita complicaciones y mejora significativamente el bienestar.
  3. Infertilidad masculina: Una realidad creciente en la sociedad actual, donde factores como el estrés, la exposición ambiental o los hábitos de vida están influyendo en la salud reproductiva. Pese a ello, sigue siendo un tema difícil de verbalizar para muchos hombres.