Banca y seguros son dos sectores económicos que comparten mucho en sus actividades. Más allá de eso, también son coincidentes en tener un reto importante en términos laborales: ambos presentan el desafío del encontrar un relevo generación en sus plantillas. Según ha podido comprobar Randstad Research en su informe «Mercado de trabajo en el sector de Banca y Seguros», estos sectores tienen plantillas envejecidas. Esto no implica problemas, pero sí la necesidad de establecer medidas para buscar un equilibrio para reducir brechas detectadas.
El empleo en la banca: un sector envejecido
En lo que respecta al sector bancario, un 51% de los empleados del sector tiene más de 45 años, lo que pone de manifiesto la falta de relevo generacional en un ámbito clave de la economía nacional. El estudio destaca que en los últimos dos años y medio, el grupo de empleados de entre 45 y 54 años ha superado consistentemente al de 35 a 44 años, ampliando la brecha entre ambos.
A su vez, los grupos de jóvenes entre 25 y 34 años, así como los trabajadores mayores de 55 años, se han mantenido estables. En la actualidad, casi uno de cada cinco empleados del sector bancario tiene más de 55 años, lo que subraya el desafío al que se enfrenta esta industria en términos de rejuvenecimiento de su plantilla.
En total, el sector bancario emplea a unas 440.000 personas en España, lo que representa una caída del 8% respecto al año pasado, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes al segundo trimestre de 2024. La mayor parte de estos empleos, un 56%, se concentra en los servicios financieros, mientras que el 27% corresponde al ámbito de los seguros y fondos de pensiones, y el 17% a actividades auxiliares. En conjunto, el sector bancario constituye el 2% del empleo total del país.
La oportunidad está en las nuevas tecnologías
A pesar de los problemas generacionales, el informe de Randstad subraya las oportunidades que se abren en el sector bancario con la revolución tecnológica. La aparición de la inteligencia artificial (IA) y el Big Data está transformando el sector, y se prevé que la demanda de nuevos perfiles tecnológicos, como analistas de IA, científicos de datos y especialistas en transformación digital, se incremente en los próximos años. De hecho, el 50% de las empresas del sector ya tiene planes para priorizar la capacitación en estas áreas, y el 85% está en proceso de adoptar estas tecnologías.
Ana Casqueiro, responsable del sector de banca y seguros de Cuentas Estratégicas de Randstad, explica que, aunque la falta de relevo generacional es preocupante, la incorporación de la inteligencia artificial ayudará a simplificar procesos y abrirá nuevas oportunidades para perfiles más jóvenes, cualificados en estas nuevas tecnologías.
Predominio femenino y alta cualificación
El sector bancario en España también se caracteriza por un predominio femenino. Las mujeres representan el 55% del total de empleados en este ámbito, una cifra que supera el promedio nacional en otros sectores. Además, el 67,3% de los trabajadores del sector cuenta con estudios universitarios, un porcentaje que alcanza el 80% en el segmento de los servicios financieros.
Las profesiones más comunes en la banca son las de técnicos y profesionales científicos, que representan un 58% del total, seguidos por contables, administrativos y empleados de oficina (30,8%), y directores y gerentes (8,9%).
El empleo estable domina en el sector
No todas son malas noticias en la banca. Una aspecto positivo sobre el empleo en las entidades financieras es la estabilidad laboral. Según el informe, el 89,5% de los empleados del sector son asalariados, y el 96,5% tiene un contrato indefinido, lo que supera en más de diez puntos la media nacional. Esto contrasta con el fenómeno del contrato fijo-discontinuo, que es prácticamente residual en el sector debido a su baja estacionalidad.
Madrid, epicentro de la actividad bancaria y aseguradora
Madrid es la comunidad autónoma con la mayor concentración de empleo en el sector de banca y seguros, con 160.557 ocupados, lo que representa el 34,3% del total nacional. La capital alberga la mayor parte de las oficinas y sedes bancarias del país, lo que la convierte en el epicentro de la actividad financiera. Cataluña, con 82.464 empleados (17,6%), y Andalucía, con 55.998 (12%), siguen a Madrid en cuanto a concentración de empleo. Estas tres regiones, junto con la Comunidad Valenciana, reúnen el 71% del total de empleos en el sector bancario.
En el segmento específico de servicios financieros, Madrid también lidera con un 37,9% de la fuerza laboral, seguida de Cataluña (16,5%), Andalucía (10,5%) y la Comunidad Valenciana (7,2%).