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Mientras para unos suponen todo tipo de facilidades, para otros, las herramientas de salud digital son un quebradero de cabeza. Las nuevas herramientas y apps con las que cuentan los hospitales y los centros de salud en España son muy útiles pero tienen el hándicap de que muchas personas no las entienden o tienen dificultades para hacer uso de ellas. Hablamos de pacientes mayores o poco apegados con la tecnología, en perfil en el que ha puesto el foco el Hospital Universitario Rey Juan Carlos de Móstoles (Madrid).

Este centro integrado en la red pública madrileña busca empoderar a los pacientes a través de talleres promovidos por el Servicio de Atención al Paciente. Estas formaciones se imparten de forma periódica en grupos reducidos y desde su puesta en marcha ya han participado cerca de 70 personas. “El objetivo principal es que conozcan bien la herramienta digital del Portal del Paciente, aprendan a utilizarla y le pierdan el miedo”, explica Gema Sánchez Gómez, directora de Experiencia de Paciente y Trabajo Social del hospital.

La siguiente está prevista para el lunes 16 de junio, con nuevas convocatorias en septiembre y octubre, siempre en horario de 12:00 a 14:00. El impulso de estos talleres forma parte de una visión más amplia: transformar la experiencia asistencial a través de la digitalización, pero sin dejar a nadie atrás. “Esperamos que, poco a poco, los pacientes utilicen más la aplicación, y que sean más autónomos en su manejo”, afirma Sánchez Gómez.

Gema Sánchez talleres de salud digital HURJC

Gema Sánchez.

Portal del Paciente: una herramienta clave en la salud digital actual

El Portal del Paciente no es solo una app para mirar citas. Es una ventana a la información sanitaria personal y una vía de comunicación directa con el hospital. A través de ella, los usuarios pueden confirmar o consultar sus citas, recibir recordatorios, acceder a informes médicos, visualizar pruebas de imagen, contactar con Atención al Paciente, conocer el estado de un familiar ingresado o incluso ubicarse dentro del propio centro.

Pero el valor añadido está en su capacidad para fomentar la autonomía del paciente. La aplicación permite registrar datos de salud, hábitos de vida o recibir consejos personalizados. Y todo ello sin necesidad de desplazarse físicamente al hospital.

“Muchas de las atenciones que ofrecemos se realizan de forma no presencial, y el Portal del Paciente es clave para que el usuario pueda acceder a ellas sin tener que venir al hospital”, señala Sánchez Gómez.

Tecnología con rostro humano

Una de las principales dificultades que encuentran los asistentes a los talleres es el acceso inicial: descargar la app, establecer una contraseña, activar el perfil… Barreras que, si bien técnicas, suelen esconder un temor más profundo: el miedo a no entender, a equivocarse, a no estar a la altura del entorno digital. Por eso, más que clases de informática, estas sesiones son espacios de acompañamiento.

“La aplicación es intuitiva y fácil de utilizar, pero lo importante es que se atrevan a navegar por ella. Una vez que superan ese primer paso, descubren lo útil que puede ser”, apunta Sánchez Gómez.

El equipo de Información del centro es el encargado de impartir estas sesiones, en las que prima el lenguaje claro y la atención individualizada. El objetivo no es solo que el paciente aprenda, sino que gane seguridad. En definitiva, que no vea la tecnología como un obstáculo, sino como una aliada.