Mercadona y el matiz del capitalismo social

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En las buenas y en las malas, las duras o las maduras, la actividad empresarial es esencial para la creación de empleo y riqueza. No solo hay que acordarse de las empresas cuando se paraliza un país, ya que su protagonismo es indiscutible para el bienestar social y económico de un territorio a lo largo de cada año.

En muchas de las charlas con directivos y profesores de escuelas de negocio suele salir un tema recurrente, que no es otro que la comparativa del modelo empresarial americano con el español. Se echan en falta las pocas trabas burocráticas que hay en Estados Unidos, la cultura del elogio al fracaso o la visión emprendedora que se estila en muchas regiones de esta parte del mundo.

pescadería mercadona

Cierto es que es otro tipo de capitalismo, pero el fin último de una compañía de cualquier parte del mundo es obtener rentabilidad y ganar dinero. Nadie crea una empresa ni compromete su tiempo y recursos para no buscar ese objetivo.

El matiz español es que muchas de las grandes empresas que se extienden en el país tienen además una visión social. Crear riqueza y empleo está grabado a fuego en la mentalidad de los nuestros. 

Todo el mundo se echa las manos a la cabeza cuando en tiempos de crisis importantes, como la de 2008 o la pandemia de la Covid-19, salen a la luz los datos sobre la desaparición o cierres de negocios. Sin embargo, poco importa, o eso parece, cuando las cosas van bien y las empresas elevan sus beneficios.

Ha caído en el olvido aquella campaña sobre las empresas esenciales durante la época más dura de la pandemia. Cuando más se necesitaban, ahí estaban los transportistas o las cadenas de alimentación

Es un estigma que permanece en el tiempo y que resulta incomprensible porque la lógica dice que hay que alegrarse cuando vienen bien dadas. A pesar del aumento de los costes laborales y otras medidas impuestas que van a contracorriente para los intereses de las empresas, éstas no han hecho más que tirar para adelante adoptando decisiones para mantener la viabilidad de sus cuentas. 

Ha caído en el olvido aquella campaña sobre las empresas esenciales durante la época más dura de la pandemia. Cuando más se necesitaban, ahí estaban los transportistas o las cadenas de alimentación trabajando sin descanso para que a la población no le faltaran suministros.

Empresas como Mercadona redoblaron esfuerzos para garantizar el acceso a productos básicos a la sociedad. Instituciones y particulares cayeron en la cuenta de la necesidad de disponer empresas fuertes, sacrificadas y con recursos para combatir una situación inédita. 

fruta y verdura de mercadona

Llegó la temida inflación

La pandemia se superó, España volvió a la normalidad y en medio de la recuperación económica, Rusia decide atacar a Ucrania, desatándose otra hecatombe económica con un fuerte aumento de la inflación.

Otra vez a lidiar con un entorno adverso. Siguiendo con el ejemplo de Mercadona, la organización liderada por Juan Roig decide incrementar el sueldo de su amplia plantilla de acuerdo con el IPC.

Por cuestiones de coherencia y siguiendo con su fiel compromiso de cuidar a su capital humano, el Comité de Dirección eleva sueldos, pero no sobre el salario base como indica el Convenio de Empresa, sino que lo hace sobre el total del salario de la plantilla incluyendo complementos correspondientes.

De este modo, la nómina de enero de 2023 de los empleados ya incorporará esta subida para que todas las personas que forman parte de esta empresa mantengan su poder adquisitivo en este momento que atraviesa la economía.

empleo mercadona

Sin duda, Mercadona puede presumir de ser un empleador de calidad porque además del componente económico, hay una política muy extensa para beneficiar a todo su personal. Esto tiene su repercusión en factores críticos como la productividad, un dato que ha elevado un 9% según admite la propia compañía.

En este sentido, la empresa de supermercados físicos de y venta online tiene dos ideas muy claras: la primera de ellas es que los mejores activos que tiene son sus trabajadores; y la otra es que cuanto más se satisface al Jefe (como internamente se llama al cliente), más avanza el negocio. 

Esa misma evolución económica también impacta sobre los accionistas. A lo largo de los tres últimos años, Mercadona ha repartido casi 1.125 millones de euros en primas sobre los beneficios.

En dicho reparto, el porcentaje que se destina a la plantilla es más del doble del que reciben los dueños de la entidad. El mismo presidente de Mercadona, siempre muy cercano a las necesidades de su región, dedica una buena parte de sus ingresos al apoyo de emprendedores, así como a otros terrenos como la actividad deportiva o de mecenazgo social. 

aportación de mercadona en 2021

La aportación a las arcas públicas

En lo que se refiere al impacto de Mercadona en la economía española, seguramente su aportación también pase por ser una de las más destacadas por la vía de los impuestos directos, indirectos e inducidos. El Ivie y la Universitat de València vienen elaborando informes en los últimos años sobre tales cifras.

Los últimos datos disponibles, correspondientes al ejercicio de 2021, señalan que la aportación directa de Mercadona sobre el PIB nacional es de 5.752 millones de euros, una cifra más que interesante y superior en un 2% al ejercicio anterior. A su vez, la actividad de esta organización ha servido para crear o mantener más de 637.000 puestos de trabajo a tiempo completo.

La actividad de Mercadona (año 2021) ha servido para crear / mantener más de 637.000 empleos a tiempo completo. De ellos, dos terceras partes tienen origen en su propia actividad 

De estos, dos terceras partes tienen su origen en la propia empresa y su relación con proveedores y un tercio en el resto de los gastos para su funcionamiento. Las inversiones de 2021 alcanzaron la cifra de 1.090 millones de euros, las cuales han permitido crear o mantener más de 23.000 empleos directos, indirectos e inducidos. Con todos estos datos, se concluye que Mercadona es responsable del 2.09% del PIB español y del 3,7% del empleo nacional. 

En términos fiscales, el volumen descrito en los informes también es muy notorio. El impacto fiscal de la actividad de la entidad ascendió en 2021 a más de 9.000 millones de euros, lo cual supone el 2% de la recaudación estimada en el conjunto de las Administraciones Públicas.

Los niveles récord que vienen registrando las arcas públicas en su recaudación tienen un protagonismo importante en Mercadona. La contribución tributaria soportada y recaudada por esta empresa asciende a 1.955 millones de euros, mientras que la generada como consecuencia del impacto indirecto e inducido se cuantifica en 5.353 y 1.699 millones de euros, respectivamente.

reparto de beneficios de mercadona en 2021

Se concluye por parte del Ivie y la Universitat de València que cada euro soportado por Mercadona se traduce en 8,1 euros recaudados por los distintos niveles de las Administraciones Públicas. 

Se evidencia que la compañía es todo un motor económico para España, pues aporta 4,7 euros al país por cada euro de renta que genera en sus tiendas, sea en forma de beneficios, alquileres o salarios. Y respecto al empleo, por cada puesto que se genera en Mercadona, se crean 7,1 para el conjunto de la economía. 

Al margen de los datos puramente financieros, cabe destacar todo lo que está haciendo el equipo de Juan Roig en materia de sostenibilidad. La ejecución de la Estrategia 6.25 sigue cumpliendo hitos en la eliminación del plástico y en líneas que buscan la eficiencia y el cuidado con el medio ambiente. Para 2025, se persigue un triple objetivo: reducir un 25% de plástico en todos los envases, que todos los envases de plástico sean reciclables y reciclar todo el residuo plástico.

Hasta la fecha, la compañía ha eliminado el menaje y las bolsas de plástico de un solo uso. Además, continúa en su afán por reducir todo el plástico de los envases y fomentar esta cultura a los clientes aportándoles indicaciones específicas. Esta transformación hacia un modelo sostenible en su actividad contará con una inversión de 140 millones de euros hasta 2025.

Por cuestiones de memoria económica o medioambiental, conviene recordar este tipo de indicadores tanto en tiempos de dificultades como de bonanza. 

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