Invertir es un arte, pero exige método y no caer en ciertos errores

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Hay un libro sobre inversiones cuyo título lo dice todo: El arte de Invertir. El autor de esta obra publicada por LID es Borja Durán, consejero delgado de Wealth Solutions y fundador y consejero de Finletic Capital.

En esta obra, Durán plantea como punto de partida tres variables que condicionarán el futuro financiero de cada uno: cuánto dinero se gana después de impuestos, qué porcentaje consigue ahorrar y cómo invierte ese ahorro a largo plazo. Estas son las claves que elevaría la gestión inversora como un arte, pero muchas personas solo se quedan en la primera de ellas.

El libro se presenta como una guía que ofrece conocimientos básicos y principios de actuación para los inversores y todo ello lo traslada a la práctica a través de una serie de consejos que guiarán al lector hacia la independencia financiera.

Además de la metodología que aporta Durán en su libro, el experto da a conocer una recopilación de los errores más habituales a la hora de mover nuestro dinero.

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10 errores a evitar en nuestras inversiones

  • Invertir sin coherencia ni objetivos. Toda estrategia financiera es eso, estrategia. Y como tal las operaciones y movimientos deben responder a una coherencia con los objetivos que se marque cada uno.
  • Dar prioridad a la rentabilidad frente al riesgo. Este es un error que el autor ha identificado en muchos casos. Según Durán, la gestión de los riesgos y el conocimiento de alternativas es más importante que la rentabilidad esperada.
  • La no diversificación. Las carteras concentradas son penalizadas por el mercado. Este error tiene fácil solución, ya que se puede eliminar fácilmente ampliando los valores de una cartera.
  • Adelantarse al mercado. El proceso de anticipación es uno de los mayores factores de riesgo. Esto tiene que ver con la excesiva visión a corto plazo que suelen tener muchos inversores.
  • Dejarse llevar por modas. Antes de guiarse por influencers poco reconocidos u otro tipo de fuentes no fiables, hay que definir claramente la política de inversión. Ese es el verdadero mástil de una estrategia.
  • Vender con plusvalías y mantener las posiciones que tienen minusvalías. Al mantener una posición con pérdidas, perdemos el coste de oportunidad de invertir en otra que vaya mejor en términos comparativos.
  • Excesiva preocupación. Las inversiones tienen un alto componente emocional y no es recomendable dejarse llevar por subidas o bajadas repentinas semanales. Las oscilaciones son normales en el cortoplacismo.
  • Ignorar los costes. Los costes hay que ponerlos en el balance. Entre ellos, los costes de gestión, los de custodia, los de intermediarios, los de productos financieros y los dividendos no percibidos.
  • Creerse muy listo. Borja Durán explica en este error que no basta con ser listo en el mercado de las inversiones, sino que hay que estar informado y actuar rápidamente.
  • No dejarse asesorar. Cualquier persona que no esté en este mundillo necesita un asesor. Esto de es de cajón. Como un médico que cuida de nuestra salud, el asesor hará lo propio con nuestra salud financiera.
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