Hace un año, Directivos y Empresas se hacía eco de la implantación del Programa de Alimentación Saludable en ciertos hospitales de la red de Quirónsalud en España. Pasado este tiempo se puede decir que la iniciativa ha sido un éxito total. El programa ya está presente en todos los centros del grupo y además los pacientes reportan un alto nivel de satisfacción con los nuevos menús.
Desde su puesta en marcha, se tuvo claro que la alimentación no solo es una parte esencial del proceso de recuperación hospitalaria, sino también un factor clave para consolidar hábitos saludables a largo plazo. El diseño de los menús ha tratado de ir más allá de las dietas terapéuticas para convertirse en un modelo de alimentación consciente, sostenible y apetecible, dentro y fuera del hospital.
En su primer aniversario, los resultados del Programa de Alimentación Saludable de Quirónsalud avalan el éxito del cambio en la dieta de loa pacientes: el 93% de ellos considera adecuada o más que suficiente la cantidad de comida, y hasta un 60% asegura que se llevaría los menús a casa si pudiera.
Programa de Alimentación Saludable de Quirónsalud: una experiencia personalizada
Desde el momento del ingreso, el paciente entra en contacto con el Programa gracias a la labor de dietistas-nutricionistas y auxiliares de enfermería, que explican las claves de su dieta durante la estancia hospitalaria. La innovación comienza desde la base: el paciente puede elegir el tamaño de sus raciones, ajustando así la comida a su apetito y evitando el desperdicio innecesario.
Este enfoque participativo no solo mejora la satisfacción, sino que también promueve una relación más consciente con la comida, algo especialmente relevante en un entorno donde la alimentación suele percibirse como secundaria.
Sabor, variedad y salud: un menú que convence
La valoración positiva de los pacientes no se limita a la cantidad. También destacan aspectos como:
- Temperatura adecuada de los platos.
- Mejora en el sabor, la textura y la presentación de los alimentos.
- Desayunos más elaborados y equilibrados.
- Menús con mayor presencia de frutas, verduras y grasas saludables.
- Eliminación de fritos, rebozados y carnes procesadas.
Uno de los cambios más significativos ha sido la renovación de las cenas mediante la implantación del llamado “plato Harvard”, una estructura nutricionalmente equilibrada en un solo plato: 50% vegetales, 25% proteínas y 25% hidratos de carbono, diseñada para ser saludable y visualmente atractiva.
Gastronomía de calidad con firma Michelin
Detrás del diseño de los menús y platos está la colaboración con Iván Cerdeño, chef toledano reconocido con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol, quien ha trabajado junto a los profesionales de cocina de los hospitales del grupo para combinar salud, sabor y presentación con estándares de alta cocina.
“Comer bien no debe ser incompatible con estar ingresado. Este programa demuestra que es posible ofrecer platos equilibrados y apetecibles también en el entorno hospitalario”, ha señalado Cerdeño en varias ocasiones.
La participación del chef no solo ha elevado el nivel culinario de los menús, sino que ha contribuido a humanizar y dignificar la experiencia hospitalaria a través de la comida, un componente emocional muchas veces olvidado.
Uno de los pilares del programa es su compromiso con el medioambiente. Permitir al paciente elegir el tamaño del plato contribuye directamente a reducir el desperdicio alimentario, mientras que la apuesta por productos frescos, integrales y no procesados se alinea con criterios de sostenibilidad y salud pública. Además, la reducción de carnes rojas y el uso de grasas saludables responden tanto a recomendaciones nutricionales como a un enfoque más responsable con el entorno.