Directivos y Empresas

Policlínica Gipuzkoa: precoces en la implantación tecnológica

Dr. Josean Rodríguez, Dr. Gregorio Gardenia, Unidad de Urología de Policlínica Gipuzkoa.
Desde la Unidad de Urología de este Policlínica Gipuzkoa perteneciente al Grupo Quirónsalud, los Doctores Gregorio Garmendia y Josean Rodríguez explican los avances, técnicas y procedimientos que se han producido en esta especialidad, con especial atención al robot Da Vinci, uno de los indiscutibles protagonistas en sus quirófanos.

Lo primero que piensan muchos de los pacientes con patologías prostáticas es en el robot Da Vinci. ¿Son tantos los beneficios con este tipo de cirugía?


El beneficio de este tipo de técnica está relacionado principalmente con la cirugía oncológica del cáncer de próstata básicamente y en muchos casos con tumores renales. De este modo, en estos casos permite un abordaje técnicamente más sencillo y preciso, teniendo como principal beneficio la recuperación funcional de los pacientes. Por ejemplo, en la patología prostática, en lo referente a disfunción eréctil e incontinencia urinaria.

Los beneficios oncológicos no están claramente demostrados con respecto a los procedimientos laparoscópicos o la cirugía convencional. Así que el resultado es mejor en la recuperación funcional, aunque también hay que sumar las ventajas de la cirugía laparoscópica: menor invasividad, menor sangrado, menor tiempo de estancia hospitalaria y menos problemas de la herida quirúrgica, al tratarse de incisiones mucho más pequeñas.

[blockquote style=»1″]Prevención del cáncer de próstata: “En general se recomienda en todo caso una revisión por encima de los 50 años y en algunos casos los 45 si existen factores de riesgo[/blockquote]

Con todas las bondades que ofrece el robot, ¿está indicado en todos los casos de cáncer de próstata?


En principio, se considera tratamiento de elección en lo que llamamos la prostatectomía radical, es decir, tumores localizados dentro del órgano que precisan una cirugía radical. No estaría indicado en diagnósticos de tumores diseminados, por ejemplo.

No obstante, se necesitan muchos recursos y formación para instalar una maquinaria de este tipo en los centros hospitalarios. ¿Qué grado de implantación de esta tecnología hay en España?


El grado de implantación es bajo, básicamente porque el coste y el mantenimiento del robot es muy elevado. Tanto la sanidad pública como la privada disponen de esta tecnología aunque el número de ellos que hay implantados es reducido. Incluso alguno de los que hay instalados no está funcionando a pleno rendimiento. Por el coste del manteniendo y del procedimiento, hay algunos robots que tienen restricciones en sus indicaciones.

Quizás es una técnica muy costosa para las pocas indicaciones que tiene… ¿Cómo lo ven ustedes?


También está probado para otras especialidades, como para la otorrinolaringología, la cirugía maxilofacial, torácica o la cirugía digestiva. Sin embargo, es en la urología donde ha alcanzado mayor desarrollo. Dentro de este campo, existen dos procedimientos que son los más frecuentes en su uso: la prostatectomía radical que antes comentaba y la nefrectomía parcial, que consiste en extirpar del riñón únicamente la parte que contiene el tumor.

No obstante, el robot Da Vinci se puede utilizar en la cirugía reconstructiva ureteral, linfadenectomía retroperitoneal y actualmente estamos empezando a usarlo en las cistectomías, es decir, quitar la vejiga por la vía robótica.
Aun así, el 95% de las intervenciones que realizamos con el robot es para patologías prostáticas tumorales y renales tumorales.

[blockquote style=»1″]Urólogo-psicólogo: “En ocasiones, parece que estamos metidos dentro de un confesionario, especialmente cuando hablamos de temas de andrología[/blockquote]

 

¿Qué otras técnicas o tecnologías se han incorporado recientemente para tratar los problemas urológicos?


Existe una revolución tecnológica constante dentro de la medicina que afecta a nuestro campo y que se ha incorporado tanto al diagnóstico como a las terapias.

Podemos observar ejemplos como la mejoría de las pantallas, en las torres de laparoscopia, la utilización de láseres, la colocación de mallas para la incontinencia, procedimientos para fragmentación litiásica… Son muchos y muy diversos los avances.

¿El de próstata es quizás el tipo de cáncer con mejor pronóstico que hay actualmente? ¿Qué “culpa” de ello tendrían las innovaciones tecnológicas?

Habría que diferenciar pacientes y patologías, no podemos hablar de cáncer como una única enfermedad, ni siquiera cuando afecta a un mismo órgano. Había que diferenciar los tipos de tumores y agresividades.

Pero yo creo que la mejora diagnóstica, el establecimiento de protocolos diagnósticos y los avances tecnológicos incorporados en las terapias están produciendo una mejora en la esperanza de vida y además una mejora en la recuperación funcional de los pacientes.

¿Cuáles son los primeros síntomas que indican que hay que hacerse una revisión de próstata? ¿Suceden siempre a edades más avanzadas?


No está establecido el screening masivo de cáncer de próstata a pacientes sintomáticos y asintomáticos, como ocurre en otro tipo de patologías. En general se recomienda en todo caso una revisión por encima de los 50 años y en algunos casos los 45 si existen factores de riesgo (familiares con el mismo diagnóstico o alteraciones genéticas). A partir de este momento, cuando el paciente lo solicite, en principio el procedimiento de screening es satisfactorio, poco invasivo y fácil de realizar.

Se dice que un urólogo tiene mucho de psicólogo con sus pacientes al tratarse de zonas del cuerpo tan sensibles. ¿Cómo lo ven ustedes desde su posición?


Yo creo que en todas las especialidades hay que tener muy en cuenta el factor psicológico. En ocasiones, parece que estamos metidos dentro de un confesionario, especialmente cuando hablamos de temas de andrología (estudio del órganos reproductor masculino).

El urólogo andrólogo que se dedica a cuestiones de la esfera sexual y de reproducción evidentemente toca temas muy sensibles para el paciente y para la pareja y desde luego que es fundamental un abordaje multidisciplinar y una cierta cercanía y tacto psicológicos. El grado de confianza, la complicidad con el paciente y el estudio combinado de la pareja es fundamental sobre todo en andrología, que trata entre otros temas la disfunción eréctil o problemas de eyaculación.

¿Por qué se dice que Policlínica Gipuzkoa es una referencia en su especialidad? ¿Cuáles son los principales logros que se han conseguido?


El hecho más relevante es que se trata de un centro que ha incorporado la tecnología robótica de forma precoz. Fue en 2009 cuando se incorporó esta tecnología. Si actualmente hay pocos centros que brindan la posibilidad de este tipo de cirugía, en 2009 menos. Los profesionales que trabajamos aquí yo diría que tenemos una dilatada experiencia en este tipo de procedimientos y técnicas.

Su especialidad no solo abarca a pacientes hombres, sino que también toca a las mujeres, un aspecto que a veces se olvida. ¿Qué servicios están dedicados a las mujeres?


Evidentemente, nuestra especialidad abarca a ambos sexos. La patología oncológica renal, ureteral, vesical… afecta tanto al hombre como a la mujer, únicamente la prostática o testicular es exclusiva de los hombres. Pero luego podemos hablar de la litiasis, la reproducción, la incontinencia urinaria etc. Es verdad que es más frecuente asistir a más hombres que a mujeres, pero en absoluto la urología es exclusiva para los varones.

¿Están desapareciendo los viejos tabúes que había sobre la salud sexual o sigue habiendo ciertas reticencias?


Yo creo que la educación, los medios de comunicación y la cultura en general han ayudado a romper determinados tabúes. Poco a poco van desapareciendo y yo diría que hoy en día el acceso a consultas de urología del tipo sexual se realiza de una forma mucho más natural. El paciente viene más confiado, acompañado de su pareja y nosotros los especialistas procuramos crear una atmósfera adecuada para poder tratar este tipo de temas.

Nos han esbozado todo lo que comprende su especialidad y nos hemos centrado mucho en el tema próstata, sin embargo sus servicios van mucho más allá… ¿Qué otras subespecialidades cubren desde su centro?


Tenemos tratamiento preferente a toda la oncología urológica, pero también tratamos litiasis, incontinencia urinaria, andrología (sobre todo en lo relativo a la disfunción eréctil) y cuestiones de reproducción. Esos serían los principales campos, si bien atendemos adicionalmente a otros procedimientos menores como pueden ser circuncisiones, vasectomías etc.


Siempre a la vanguardia


Con más de 40 años de actividad, Policlínica destaca por permanecer siempre a la vanguardia de la sanidad privada, llegando a protagonizar distintos hitos como ser pionera en la incorporación de las últimas tecnologías, como lo fueron en su día la resonancia magnética, el TAC de 64 cortes o diferentes técnicas de cirugía mínimamente invasiva. También fue pionera en incorporar un robot quirúrgico ante las evidentes ventajas que ofrece. Gracias a todo ello, este centro es una referencia a nivel nacional. Todo está diseñado para que la armonía entre los diferentes niveles asistenciales sea máxima.
Policlínica Gipuzkoa pertenece al Grupo Quirónsalud, el grupo hospitalario más importante  de España y el tercero de Europa. Está presente en 13 comunidades autónomas, cuenta con la tecnología más avanzada y dispone de una oferta superior a 6.200 camas en más de 80 centros, así como con un gran equipo de profesionales altamente especializados y de prestigio internacional.


CURRICULUM VITAE

Gregorio Garmendia
• Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco (1986-1992).
• Titulación postgrado: Cursos de Doctorado – Suficiencia investigadora: “Resultados de la braquiterapia de baja tasa como terapéutica radical en el cáncer de próstata de bajo riesgo”.
• Título de especialista en Urología: Formación vía MIR en el Servicio de Urología del Hospital Donostia (1994- 1998).
• Estancia hospitalaria en el Departamento de Urología del Profesor Mark S. Soloway en el Jackson Memorial Hospital of Miami (EE.UU.).
• Estancia hospitalaria en el Servicio de Urología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, con atención preferente en la formación relativa a cirugía laparoscópica.
• Estancia hospitalaria en el Servicio de Urología del Complejo Hospitalario Juan Canalejo de La Coruña, con atención preferente en la formación relativa a cirugía vasculorrenal y trasplante renal.

ACTIVIDAD LABORAL
• Médico adjunto FEA UROLOGÍA. Hospital Donostia. Estatutario.
• Urólogo Instituto Oncológico de San Sebastián (2003-2014).

DOCENCIA Y DIFUSION DEL CONOCIMIENTO
• Docencia residente: Tutor de Residentes de Urología desde 1/7/2004.
• Difusión del conocimiento. Reuniones científicas y de divulgación y publicaciones.

OTRAS ACTIVIDADES
• Miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Vasca de Urología.
• Miembro de la Comisión de Docencia del Hospital Donostia.
• Perteneciente a la Sociedad Vasca de Urología.
• Perteneciente a la Sociedad Española de Urología.
• Técnico Superior en Prevención de Riesgos Laborales.


José Antonio Rodríguez
• Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco (1983).
• Especialista de Urología vía MIR en el Hospital Aránzazu (actual Hospital Donostia) en 1992.
• European Board of Urology en Holanda (1994).
• Socio Numerario de SINUG (Socidad Iberoamericana de Neuro-Urología  y Uroginecología) desde 1996.

EVENTOS, SOCIEDADES Y DOCENCIA
• Participación como Secretario, Vocal, Miembro comité organizador o Tesorero en reuniones de sociedades científicas o grupos urológicos.
• Vocal por Guipúzcoa de la Sociedad Vasca de urología del 2002 al 2006.
• Tutor de Médicos Residentes de Familia en rotación de Urología en el Hospital de Mendaro desde 1999 hasta la actualidad.
• Participación en el Comité de Docencia en 2007 y en el Comité de Historias Clínicas desde 1994 hasta 2001 (Hospital de Mendaro).
• Miembro del equipo quirúrgico en varias jornadas sobre incontinencia urinaria masculina (Hospital de Mendaro).
• Participación en más de 10 ensayos clínicos como investigador principal o colaborador aprobados por el Comité de Ensayos Clínicos de Osakidetza.
• Participación en el desarrollo de investigación y realización de patente sobre prótesis endouretal para la anastomosis de la unión uretro-vesical tras prostatectomía radical en 2014 en el Hospital de Mendaro.
• Participación en jornadas quirúrgicas en múltiples hospitales como invitado para la colocación de prótesis de incontinencia masculina o cirugía e implantes de mallas de suelo pélvico en la mujer.
• Perteneciente a la Sociedad Vasca de Urología.
• Perteneciente a la Sociedad Española de Urología.

 

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