Icono del sitio Directivos y Empresas

Jornada de concienciación sobre el cáncer de próstata de la Fundación Jiménez Díaz para romper tabús, resolver dudas y presentar los últimos avances

Jornada de concienciación sobre el cáncer de próstata de la Fundación Jiménez Díaz

Los pacientes oncológicos siempre agradecen compartir su situación con otros pacientes que tienen su misma enfermedad, así como con médicos que hablen de tú a tú sobre una patología en concreto. Tratándose del mes internacional dedicado a la salud masculina – Movember – el cáncer de próstata ha centrado la agenda de muchas de estas jornadas en las que se dan cita expertos y ciudadanos para charlar sobre tal enfermedad.

El Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz ha celebrado recientemente una jornada de concienciación, muy divulgativa, en la que han estado presentes los especialistas del servicio de Urología del centro madrileño. Pacientes, familiares y ciudadanos en general asistieron a una sesión que fue inaugurada por dos referentes de la urología española: la doctora Carmen González Enguita, jefa del Servicio de Urología de la FJD y presidenta de la Asociación Española de Urología (AEU), y el doctor Ramiro Cabello, jefe asociado del mismo servicio.

Ambos coincidieron en subrayar la importancia de generar espacios de confianza donde los profesionales puedan explicar sin tecnicismos los avances científicos, y los pacientes compartan dudas y vivencias que rara vez encuentran un lugar para expresarse. “Romper tabúes es una necesidad sanitaria”, señalaron, insistiendo en que la información clara y accesible es una herramienta tan valiosa como cualquier tratamiento.

Comprender la próstata: síntomas que no deben normalizarse

La primera intervención de la jornada, a cargo de la doctora Eva García, puso el foco en los síntomas, la desinformación y la falsa normalización que todavía persisten en torno a la salud prostática. Explicó que muchos hombres conviven durante años con molestias urinarias que consideran “cosas de la edad”, retrasando consultas clave para detectar a tiempo la enfermedad.

“Consultar no es una muestra de debilidad, sino de responsabilidad”, afirmó, recordando que las tasas de supervivencia del cáncer de próstata han aumentado notablemente gracias al diagnóstico precoz. La especialista repasó además el papel del PSA (antígeno prostático específico), la eficacia de la resonancia magnética (RNM) y la importancia de las revisiones periódicas en hombres de riesgo.

Del PSA al diagnóstico de precisión: la revolución de la biopsia por fusión

La doctora Carmen Gomis continuó la sesión profundizando en el proceso diagnóstico actual y en la importancia de contextualizar adecuadamente cada caso. Explicó que un PSA elevado no siempre implica un tumor: infecciones, inflamaciones o incluso actividades cotidianas pueden alterar sus valores. Por ello, antes de alarmarse, es fundamental repetir la analítica, realizar una exploración y estudiar el historial clínico.

La especialista destacó también el papel central de la resonancia magnética en la detección precoz y en la toma de decisiones, especialmente cuando se combina con herramientas de estimación de riesgo que evitan biopsias innecesarias. Pero insistió en que “la confirmación del diagnóstico solo llega mediante la biopsia”.

En este punto, detalló los beneficios de la biopsia por fusión —técnica que combina ecografía y RNM en tiempo real—, que permite tomar muestras de forma mucho más precisa. “No se busca biopsiar más, sino biopsiar mejor”, subrayó, dejando claro que el objetivo es equilibrar precisión diagnóstica y bienestar del paciente.

Tratamientos personalizados y cirugía mínimamente invasiva

El Dr. Cabello dedicó su intervención a los tratamientos disponibles hoy en día, muy diferentes a los de hace una década. Explicó que muchos cánceres detectados en sus fases más iniciales pueden seguirse mediante vigilancia activa, un enfoque que evita intervenciones innecesarias en tumores de muy bajo riesgo.

Cuando la cirugía es necesaria, la Fundación Jiménez Díaz apuesta por técnicas mínimamente invasivas, tanto laparoscópicas como robóticas. Estas tecnologías ofrecen una precisión instrumental extraordinaria, permiten una visión tridimensional del campo quirúrgico y facilitan la preservación de estructuras clave para la continencia urinaria y la función sexual.

“La prioridad es curar, pero también preservar la calidad de vida del paciente”, indicó Cabello.

Radioterapia de alta precisión

La doctora Sara Pérez, especialista del Servicio de Oncología Radioterápica, trasladó a los asistentes los avances en radioterapia, un tratamiento que continúa evolucionando y que se ha convertido en una opción curativa para la enfermedad localizada. Explicó que las nuevas tecnologías permiten ajustar diariamente la posición exacta de la próstata y detener el tratamiento si se detecta cualquier desplazamiento, aumentando así la seguridad.

Gracias a este nivel de precisión, los tratamientos actuales presentan menos efectos secundarios, esquemas más cortos y una menor afectación de los órganos vecinos, especialmente la vejiga y el recto. “El objetivo es curar sin comprometer la vida diaria del paciente”, señaló.

La enfermedad avanzada: más alternativas terapéuticas que nunca

La Dra. Eva García retomó la palabra para abordar las opciones terapéuticas disponibles en los casos de enfermedad avanzada. Subrayó el momento esperanzador que atraviesa el campo, con nuevas líneas hormonales, radiofármacos, inmunoterapia y terapias dirigidas basadas en alteraciones genéticas. Estas estrategias permiten personalizar de forma muy precisa el tratamiento, aumentando la eficacia y reduciendo la toxicidad.

Además, remarcó que el acompañamiento emocional, la coordinación entre especialidades y la información continua son pilares indispensables para que el paciente no se sienta solo durante el proceso.

La jornada concluyó con un coloquio moderado por la Dra. González Enguita en el que participaron TheMoveMen, ANCAP y AECC, tres asociaciones que trabajan activamente en el acompañamiento a los pacientes con cáncer de próstata. Sus representantes compartieron cómo impacta el diagnóstico en la vida emocional, social y familiar, subrayando la importancia de crear redes de apoyo que eviten el aislamiento. Coincidieron en que visibilizar el proceso y compartir experiencias no solo reduce el miedo, sino que ayuda a otros hombres a identificar señales de alerta y buscar ayuda médica de forma temprana.

Salir de la versión móvil