La tercera jornada de huelga conjunta de Metro y de los autobuses de la EMT (Empresa Municipal de Transportes) inaugura este lunes otro mes de paros que ya ha complicado hoy la hora punta a muchos madrileños.
MADRID, 1 (EUROPA PRESS)
La tercera jornada de huelga conjunta de Metro y de los autobuses de la EMT (Empresa Municipal de Transportes) inaugura este lunes otro mes de paros que ya ha complicado hoy la hora punta a muchos madrileños.
La Empresa Municipal de Transportes (EMT) ha fijado servicios mínimos de entre el 40 y el 50 por ciento de la dotación habitual de cara a la huelga de autobuses, coincidiendo con la de Metro, cuyos servicios mínimos de trenes son del 53 por ciento entre las 6.45 y las 8.45 horas y del 42 por ciento entre las 18 y las 20 horas.
De este modo, los servicios mínimos en las líneas diurnas de la EMT serán de un 40 por ciento de la dotación habitual de autobuses en aquellas líneas con itinerarios concurrentes con la red de Metro de Madrid. Por su parte, los servicios mínimos serán de un 50 por ciento de la dotación habitual de autobuses en aquellas líneas con itinerarios no concurrentes con Metro.
En ambos casos, la dotación mínima será de dos vehículos por líneas, salvo en los trayectos que funcionan normalmente con un vehículo. Los servicios mínimos decretados para la red de autobuses nocturnos se prestarán con un autobús por línea.
El Comité de Empresa de la EMT ha convocado paros parciales en el servicio de autobuses urbanos. Los paros se realizarán en tramos de dos horas en horario de madrugada, mañana y tarde. Así, el lunes 1 de octubre los paros están convocados de 23 a 1 horas, de 7 a 9 horas y de 19 a 21 horas. Los paros para el servicio nocturno comenzarán a las 23 horas de este domingo.
En este sentido, el Consorcio Regional de Transportes de Madrid ha decretado estos servicios mínimos que deberán cumplirse en la prestación del servicio de líneas de la EMT durante los tramos horarios en los que se han convocado los paros parciales.
EL OBJETIVO DE LA HUELGA
El Comité de Empresa de la EMT se sumó a los paros parciales que ya había convocado Metro para los días 21 y 28 de septiembre y 1 de octubre de 2012 con el objetivo, según señaló el portavoz de CC.OO. en la EMT, Alberto Blanco, de "solidarizarse con los compañeros del transporte público colectivo.
Así, ambos Comité de Empresa han convocado estos paros para mostrar el desacuerdo de los trabajadores con la reforma laboral emprendida por el Gobierno.
UGT y CC.OO. Madrid indicaron a Europa Press que habían firmado un 'Acta de Desacuerdo' de los servicios mínimos fijados por el Consorcio Regional de Transportes para las huelgas que tuvieron lugar el 17, 21 y 28 de septiembre, así como para la que tendrá lugar este lunes, 1 de octubre.
En este sentido, los portavoces de los sindicatos en Metro y EMT han concretado que "se acogen al de servicios mínimos que se pactaron con la Consejería de Presidencia y Justicia para la huelga general del 29 de marzo del 2012".
ESTA ES LA PRIMERA HUELGA DE LAS CUATRO CONVOCADAS PARA OCTUBRE
Los sindicatos convocaron la semana pasada nuevos paros parciales de Metro y EMT para los próximos días 22, 26 y 29 de octubre. En metro los paros se producirán entre las 2 y las 5 de la madrugada; las 6 y las 9 de la mañana, y las 17 y 20 horas, mientras que en la EMT se ha convocado paros de dos horas para estos días, pero todavía no han decidido los horarios.
Asimismo, los trabajadores del transporte público madrileño han convocado una manifestación para el 18 de octubre, y han llamado a participar en la misma a Renfe, Adif, Fever y a todos los trabajadores de la administración local y autonómica, entre ellos a los de Telemadrid. La manifestación se desarrollará entre la Plaza de la Villa y la Puerta del Sol, a partir de las 18 horas.
Previamente, el día 1 de octubre tendrá lugar una concentración en la Puerta del Sol a las 18 horas.
Estas acciones se suman a las que vienen realizando los sindicatos contra el Real Decreto 20/2012, por el que, entre otras cosas, se elimina la paga extra de diciembre a los trabajadores públicos, y que, según Arrivas, "vulnera la negociación colectiva" y "pretende acabar con el Estado del bienestar".
