El director general de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), José María Múgica, ha expresado su preocupación por la falta de competencia en la cadena alimentaria, ya que lo considera «imprescindible» para el beneficio de los consumidores.
MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El director general de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), José María Múgica, ha expresado su preocupación por la falta de competencia en la cadena alimentaria, ya que lo considera «imprescindible» para el beneficio de los consumidores.
«La OCU comparte el objetivo de esta ley y considera que es necesario aportar transparencia para garantizar la competencia para el beneficio de los consumidores», apuntó Múgica durante su comparecencia en la comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en el Congreso de los Diputados.
Por eso, la organización de consumidores apuesta por «garantizar la eficiencia, que es imprescindible para generar competencia», ya que entiende que la falta de competencia hace prevalecer las «marcas de distribución», que pueden determinar la expulsión de las marcas del fabricante.
«Queremos expresar nuestra preocupación por la falta de competencia que los estudios están poniendo de manifiesto con cuatro riesgos: la concentración del mercado, la menor oferta de marcas en los establecimientos, la exclusión de segundas y terceras marcas del fabricante y que la subida de precios son más acusadas en productos de marcas blancas que en marcas líderes», desveló.
Por su parte, la presidenta de Unión Nacional de Cooperativas de Consumidores y Usuarios de España (Unccue), Ana Isabel Ceballo Sierra, lamentó que en esta ley «no se reconoce la importancia en el eslabón de esta cadena del consumidor». «Los consumidores no somos agentes pasivos que sólo buscamos precios. Hemos incrementado nuestra fuerza y solicitamos que nos incorporen como parte fundamental en la cadena alimentaria», subrayó.
FIAB PIDE CONTROLAR LAS PRÁCTICAS ABUSIVAS.
Por otro lado, el secretario general de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), Horacio González-Alemán, también apuntó la necesidad de controlar las «prácticas abusivas» entre los agentes de esta cadena, exigiendo «transparencia» en estos procesos.
«Esta es una ley integradora y es buena porque vela por el bien del mercado. La posibilidad de tener un código de conducta, donde todos unidos hagamos la letra pequeña y entendamos esos ámbitos como un foro de debate, sería el complemento perfecto de la parte dispositiva de la norma», destacó.
El representante de FIAB, además, subrayó la importancia de la «transparencia» en las relaciones entre los agentes de la cadena. «Hay que desterrar ciertas prácticas y volver a las buenas prácticas mercantiles y a la práctica leal», subrayó.
Por su parte, el presidente de Promarca, Ignacio Larracoechea, se congratuló de que siendo todas las organizaciones «tan distintas» van de la mano en estas modificaciones de la ley de la cadena alimentaria, que es una norma «muy positiva en su conjunto».
Así, aseguró que no sólo defienden a las marcas, también al consumidor, y subrayó que se «observan discriminaciones injustificadas que no se basan en el bien del consumidor».
El directivo de Promarca criticó que actualmente las «marcas blancas van aumentando en su cuota de mercado y van subiendo sus precios», lo que no se está traduciendo en mejores precios para el consumidor.
