BARCELONA, 19 (EUROPA PRESS)
El presidente de Henkel Ibérica, Rodolfo Schornberg, ha señalado este miércoles que la compañía se ha marcado como objetivos globales para 2016 alcanzar una facturación de 20.000 millones de euros, de los que un 50% debe provenir de los mercados emergentes, superando el 43% que representaron en 2013.
Los objetivos se enmarcan dentro del plan global de la empresa para el período 2013-2016, en el que también se quiere lograr un crecimiento orgánico de entre el 3% y 5%, y aumentar un 10% el valor de las acciones, ha remarcado Schornberg durante una conferencia en Esade.
En cuanto al comportamiento de Henkel Ibérica, ha subrayado la «firme voluntad» de continuar ganando cuota de mercado y de que la filial gane peso en las ventas totales de la compañía, que el año anterior representaron casi un 3% (488,4 millones sobre 16.355).
«ESTRUCTURAS GLOBALES»
Schorberg ha remarcado la «importancia» de construir empresas con «estructuras globales» –con una dirección mundial– para que todas las filiales actúen en base a unos mismos objetivos, con equipos operativos a nivel local.
Ha destacado que anteriormente las filiales tenían más autonomía y que eso podía dificultar que la compañía ofreciera el mismo producto y servicio en todo el mundo, algo que, a su parecer, es clave para cualquier empresa de carácter global: «Las filiales en los países han pasado a ser líderes en desarrollo e innovación a ser líderes en implementación. Y eso requiere un cambio de chip».
También ha vinculado el éxito de Henkel a la decisión de que ningún miembro de tercera generación de la familia esté en las estructuras ejecutivas, pero que, a la vez, la compañía no haya renunciado a su carácter familiar, que le aporta «mucha estabilidad».
