BARCELONA, 18 (EUROPA PRESS)
La compañía papelera Miquel y Costas prevé continuar este año con su plan de expansión internacional e implantarse en Filipinas y Brasil, así como impulsar la diversificación de su gama aumentando los productos de valor añadido.
En rueda de prensa este miércoles antes de la celebración de la junta de accionistas, el presidente del grupo, Jordi Mercader, ha explicado que la implantación en Filipinas tiene como objetivo la obtención de la materia prima para la nueva fábrica de Terranova Papers en La Pobla de Claramunt (Barcelona), operativa desde finales del año pasado.
Además, ha señalado que permitirá a la compañía estar más próxima al área de Asia-Pacífico, muy importante para su negocio internacional debido a su potencial de crecimiento.
En Brasil, ha explicado que la implantación debe tener un componente fundamentalmente comercial para aumentar las ventas en el país: "Queremos hacer un paso más de proximidad y no ser un simple exportador", ha señalado Mercader, que ha concretado que probablemente se constituirá una sociedad anónima y no solo una oficina comercial para estudiar una futura implantación industrial.
"No descartamos que sea el inicio para que en algún momento podamos hacer una implantación industrial en Brasil", ha añadido Mercader, aunque ha subrayado que se deberá estudiar con tiempo y calma y no ha querido marcar una fecha para tomar esta decisión.
INVERSIONES
El grupo catalán prevé invertir unos 30 millones de euros entre este año y el próximo, de los que la mayoría (entre un 35 y un 40% del total) se destinará a las plantas que tiene en la comarca de la Anoia (Barcelona), un 25% a Sant Adrià de Besòs (Barcelona), un 10% a Tortosa (Tarragona) y otro 10% a Valencia, mientras que el 20% restante será inversión corporativa, donde se incluye la inversión internacional y la mejora tecnológica.
Las inversiones se destinarán a mejorar la calidad, la diversificación de mercados y especialmente al desarrollo de nuevos productos, la mayoría (entre tres y cinco) en la línea de negocio del tabaco, pero también en los otros sectores en los que opera, como la alimentación, la industria, la impresión y el embalaje.
Mercader ha indicado que el peso específico del negocio del tabaco en volumen de producción va disminuyendo –ha pasado de representar el 61% en 2012 al 53% el año pasado–, mientras que aumenta la línea de negocio de productos industriales, pero en facturación se mantiene –supera el 70%– porque los productos son cada vez de mayor valor añadido y, por tanto, de un precio más elevado.
La planta de Terranova, una de las principales apuestas del grupo en la línea de productos industriales, trabaja a un 60% de su capacidad productiva, aunque solo el 15% se dedica a productos que ya se comercializan, mientras que el resto son homologaciones, lo que supone producción pero no ingresos.
DIVIDENDO
Miquel y Costas ha aprobado en su junta de accionistas el reparto de un dividendo complementario de 2 millones de euros a cargo del ejercicio 2013 –obtuvo un beneficio neto de 27,1 millones de euros–, lo que supone un aumento del 6% del dividendo distribuido con cargo a 2013 respecto al del ejercicio anterior.
Mercader ha defendido la política de dividendos de la compañía, "prudente pero siempre creciente", lo que ha asegurado que es una de las bases que ha permitido que la compañía se haya podido desarrollar como ha hecho hasta ahora.
Para este año, ha augurado unos resultados similares a 2013; ha señalado que en el primer semestre serán inferiores porque en la primera mitad del año pasado aún no estaba en funcionamiento la planta de Terranova, mientras que a partir del segundo semestre serán "más homogéneos".
